Las autoridades penitenciarias de Costa Rica interceptaron a un gato doméstico que era utilizado para introducir drogas en la Penitenciaría de Pococí, ubicada en la provincia de Limón. El felino, apodado “Narco-Michi” en redes sociales, llevaba adheridos a su cuerpo dos paquetes que contenían sustancias ilícitas.

El incidente ocurrió a principios de mayo, cuando un oficial de vigilancia observó al animal en la zona verde del penal. Al notar un abultamiento en su pelaje, el agente alertó a sus compañeros, quienes lograron capturar al gato.

Tras una inspección, se descubrió que transportaba aproximadamente 235 gramos de marihuana y 67 gramos de pasta de crack, además de dos pliegos de papel utilizados comúnmente para liar cigarrillos. La conducta inusual del gato llamó la atención del a

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