Activistas, abogados y funcionarios electos advierten sobre el caos y la devastación tras una decisión de la Corte Suprema el viernes que trastocó la vida de medio millón de migrantes de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela, muchos de ellos residentes del sur de Florida, quienes podrían enfrentar la deportación a sus países en conflicto tras perder las protecciones legales bajo un programa de parole de la era Biden.
Entre ellos se encuentra Orlando Valecillos, de 71 años, quien vino de Venezuela para reunirse con su hija gracias al programa y tiene programada una cirugía el próximo mes.
“Espero no ser deportado antes de mi cirugía”, declaró Valecillos, residente de Homestead, al Miami Herald. “He tenido serios problemas de próstata y el tratamiento comenzó solo después de nuestra llegada