El Departamento de Justicia presentó la denuncia el miércoles ante el Tribunal de Distrito de EE. UU. para el Distrito Norte de Texas, para revocar la ley de Texas que permite a los residentes sin estatus legal pagar tarifas de matrícula estatales en universidades públicas.
Se trata de la última medida del presidente Donald Trump para reestructurar la educación superior y la inmigración, impulsando una agresiva agenda de “Estados Unidos Primero”.
El recurso, presentado en el distrito norte de Texas, alega que el estado está rompiendo la ley al “discriminar de manera inconstitucional” a los ciudadanos estadounidenses, entregando “beneficios” a jóvenes “extranjeros”.
El programa, establecido en 2001 con la aprobación de una ley conocida como Texas Dream Act, permite que ciertos jóvenes