La “revolución” de Fidel Castro presumió durante décadas de sus logros en el campo deportivo, pero la realidad actual de Cuba se aleja bastante de aquellos resultados históricos, y ahora el gobernante Miguel Díaz-Canel busca un apoyo insólito de China.
Una fuerte crisis económica, fuga de atletas, escasez de alimentos y otras condiciones esenciales, instalaciones deterioradas y una larga lista de dificultades, entorpecen el desarrollo del llamado deporte “revolucionario”.
El lunes, en el Palacio de la Revolución, Díaz-Canel recibió a Gao Zhidan, miembro del Comité Central del Partido Comunista de China, director de la Administración General de Deportes de ese país y presidente del Comité Olímpico chino.
Según fuentes oficiales de La Habana, el gobernante cubano valoró de “muy significat