Un equipo de investigadores, liderado por Makoto Tachibana, biólogo de la Universidad de Osaka, logró inducir una reversión sexual completa en ratones mediante una serie de experimentos que demostraron que niveles extremadamente bajos de hierro en la madre pueden transformar a embriones genéticamente masculinos en hembras, sin importar su constitución cromosómica.
El consenso científico establece que el sexo de los mamíferos se define desde el momento en que el espermatozoide fecunda al óvulo en un proceso determinado por la genética. Los machos poseen un cromosoma X y uno Y (XY), mientras que las hembras tienen dos cromosomas X (XX). No obstante, esta nueva investigación ha puesto en duda esa premisa.
“Hasta donde sabemos, esta es la primera demostración de que un factor ambiental pu