WASHINGTON — La alianza entre el presidente Donald Trump y Elon Musk despegó como uno de los cohetes de SpaceX: con gran impulso y alcanzando alturas impresionantes... Y luego explotó.
La espectacular ruptura alcanzó su punto más álgido el jueves cuando Trump amenazó con cancelar los contratos que tiene Musk con el gobierno y el empresario respondió afirmando —sin presentar evidencias— que la Casa Blanca no ha publicado todos los registros relacionados con el abusador sexual Jeffrey Epstein porque Trump aparece en ellos.
La caótica ruptura entre el presidente de Estados Unidos y el hombre más rico del mundo se desarrolló en sus respectivas plataformas de redes sociales después de que, durante una reunión en la Casa Blanca con el nuevo canciller alemán, un periodista le preguntó a Trump