Rusia se encuentra en estado de máxima alerta en el extremo oriental de su territorio, específicamente en la península de Kamchatka. Un volcán que llevaba más de 450 años inactivo, el Kracheninnikov, de más de 1.800 metros de altura, entró en erupción este fin de semana, lanzando una columna de cenizas de casi 6.000 metros.
Esta reactivación se produce tan solo días después de un potente terremoto de magnitud 8,8 que sacudió la regió n y generó alertas de tsunami en todo el Océano Pacífico.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia informó que "la nube se ha extendido hacia el este, en dirección al océano Pacífico", y aclaró que no hay zonas habitadas ni grupos de turistas en la trayectoria de la nube de cenizas. Las autoridades rusas mantienen la zona bajo vigilancia consta