Rusia atraviesa momentos de incertidumbre tras la inesperada erupción del volcán Kracheninnikov, que permanecía inactivo desde hace más de 450 años. Este fin de semana, el volcán ubicado en la Península de Kamchatka lanzó una impresionante columna de cenizas que alcanzó casi 6 mil metros de altura, según reportó el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso.
La región, conocida como la "Tierra de Fuego y Hielo" por su intensa actividad volcánica y geotérmica, está en máxima vigilancia luego de que dos fuertes terremotos sacudieran la zona, el más potente con magnitud 8.8, el mayor registrado desde 1952. Las autoridades informaron que la nube de cenizas se desplaza hacia el este, en dirección al Océano Pacífico, y mantienen un monitoreo constante debido a la cercanía de áreas pobladas.