El presidente Donald Trump ordenó este jueves un nuevo censo de población que excluya a los migrantes que se encuentren en Estados Unidos “ilegalmente”, un año antes de las elecciones de medio mandato.
Estados Unidos realiza un censo cada 10 años. El próximo está previsto para 2030.
Esta herramienta se utiliza para diversos fines. Permite redibujar los mapas electorales y, por lo tanto, influye en el número de votos que cada estado aporta al colegio electoral (el organismo que elige formalmente al presidente), en los escaños del Congreso y en las políticas y asignación de fondos federales.
Durante su primer mandato, de 2017 a 2021, Trump intentó incluir una pregunta sobre la ciudadanía en el censo de 2020, pero la Corte Suprema se lo impidió.
Ahora vuelve a intervenir, consciente d