Viena, 7 ago (EFE). – Un tribunal austríaco ha dictaminado que las ranas de un estanque privado hacen demasiado ruido y su croar constituye una «contaminación acústica», razón por la que el propietario deberá pagar unos 30.000 euros para indemnizar a su vecino y cubrir los costes del juicio.
Así lo informa hoy la televisión pública austríaca ORF, destacando la sorpresa desatada por esta sentencia en un litigio entre dos vecinos de la localidad de Pasching, en el norte del país.
Hasta ahora, otras demandas similares habían sido desestimadas porque se trata de una especie protegida y el croar de las ranas se ha considerado siempre un sonido natural, recordó Julia Kropfberger, presidenta de la Asociación para la Conservación de la Naturaleza de Alta Austria.
Contaminación acústica
El prop