PROGRESO.— Rodeado de cinco de sus siete hijos que tuvo en sus matrimonios, así como de su hermana Edith, de 80 años , sobrinos y demás familiares, Ángel Alfonso González Sosa celebró su 102 cumpleaños.
Para festejarlo pidió que lo trasladen de su residencia en Tuxtepec, Oaxaca , a este puerto, para estar con su gente.
Con los achaques propios de la edad, el centenario progreseño no padece diabetes ni hipertensión, tampoco del colesterol ni triglicéridos ; aún camina, aunque despacio, se baña solo, come y duerme bien.
“Mi papá morirá, no de una enfermedad, sino por su edad, pues tampoco está enfermo del corazón, siempre está contento”, expresa Ernesto Alfonso, de 68 años de edad, uno de sus siete hijos.
Una historia para recordar
El longevo progreseño durante toda su vida tra