En el año 2001, Carmina Ordóñez aseguraba en el programa Crónicas marcianas que había sufrido maltrato por parte de su exmarido Ernesto Neyra . El escándalo traspasó las pantallas televisivas y acabó con una denuncia de “la divina” contra el bailarín.
Neyra siempre negó los hechos y, un año más tarde, en marzo de 2002, el Juzgado de Instrucción número 6 de Madrid desestimó la querella presentada por Carmina porque, según el auto judicial, no se habían aportado pruebas fehacientes de que se produjeran las palizas denunciadas por la querellante . También señalaba que las supuestas abrasiones no se denunciaron en su momento ni se aportaron certificados médicos de los daños sufridos.
Mucho tiempo antes, vimos aparecer a Ordóñez en televisión con moratones en la cara pero, ante la incre