El presidente de Colombia, Gustavo Petro, explicó su ausencia en las honras fúnebres del senador Miguel Uribe Turbay, quien fue asesinado el pasado 7 de junio. A través de su cuenta de X, Petro afirmó: “No vamos porque no queramos, simplemente respetamos a la familia y evitamos que el sepelio del senador Miguel Uribe sea tomado por los partidarios del odio”.

La decisión de no asistir fue confirmada por el ministro del Interior, Armando Benedetti, quien comunicó que la familia de Uribe había solicitado que ni el presidente ni otros representantes del Gobierno estuvieran presentes en el funeral. Benedetti detalló que desde el lunes se había mantenido comunicación con la familia, y que tras reflexionar, decidieron que era mejor que el Gobierno no asistiera en esos momentos de dolor.

La vicepresidenta Francia Márquez también se pronunció al respecto, expresando sus condolencias a la familia de Uribe y confirmando que no asistiría a las honras fúnebres en la Catedral Primada de Bogotá, en respeto a la decisión de la familia. En su mensaje, Márquez hizo un llamado a la unidad y la reconciliación en el país.

El fallecimiento de Miguel Uribe ha generado un clima de reflexión sobre la violencia en Colombia. La vicepresidenta había manifestado anteriormente su tristeza por el asesinato, señalando que “la violencia no puede seguir marcando nuestro destino”.

En cuanto a las investigaciones sobre el atentado que resultó en la muerte de Uribe, Petro insinuó que el ELN podría estar involucrado. A pesar de que la Fiscalía ha logrado la judicialización de seis personas, aún se desconoce con certeza quiénes son los responsables del crimen.

El presidente ha reiterado la importancia de esclarecer los hechos y ha señalado que la investigación determinará la verdad detrás del asesinato del senador. La situación actual ha llevado a un llamado a la paz y a la necesidad de rechazar la violencia en todas sus formas.