¿Cuántas veces te has sentido discriminada por ser mujer? Si saco la cuenta, los dedos de mis manos y mis pies no alcanzarían: “las mujeres no hacen esto”, “las mujeres no pueden”, “tú, por ser mujer, no sabes”. Hacía mucho que no me pasaba algo así. Bastó que la figura del poder, representada en color verde oliva, me mandara a orillarme a la izquierda, me pidiera los papeles de la moto y, en un abrir y cerrar de ojos, me soltara lapidariamente: “Acá no pasa, señorita. Nueva orden, mujeres manejando moto no están permitidas”. ¿Qué me estás diciendo?, ¿de dónde se sacan esas incoherencias?, ¿en qué siglo estamos, en el XIX, en donde mujeres y personas afro no tenemos alma, ni humanidad?

Y así, por arte de magia, me volaron más de un siglo de conquistas de las mujeres porque según la “nuev

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