Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) se han convertido en una pieza clave de la estrategia ambiental de muchas ciudades españolas. Fijada por la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética , y desarrollada posteriormente en el Reglamento General de Circulación y la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial , su objetivo es reducir la contaminación en los núcleos urbanos, restringiendo el acceso a determinados vehículos en función de su etiqueta medioambiental.
Pero esta nueva realidad, con implantación progresiva desde el año 2023 en ciudades de más de 50.000 habitantes o territorios con más de 20.000 que incumplían la normativa en materia de calidad del aire, ha generado confusión entre los conductores. Así pues, muchos se preguntan: ¿