La inflación en Brasil ha cedido más de lo previsto por los analistas en los últimos meses, pero aún se mantiene por encima de la meta oficial y alimentada por una fuerte demanda interna. Ante este panorama, el Banco Central considera necesario mantener por un “período muy largo” una política monetaria restrictiva.
“El mercado laboral sigue brindando un apoyo considerable al consumo y a los ingresos, mientras que la inflación de servicios se mantiene por encima del nivel compatible con el objetivo del 3%”, afirmó el director de Política Económica, Diogo Guillen, durante una presentación en una reunión a puerta cerrada, cuyo contenido fue divulgado posteriormente por la autoridad monetaria.
La inflación general ha sorprendido a la baja en varias mediciones recientes, lo que llevó a alguno