El acoso telefónico es una realidad que afecta a miles de personas hoy en día, como consecuencia de la gran cantidad de llamadas que reciben. Este fenómeno puede resultar sumamente molesto, incluso abrumador, ya que estas comunicaciones suelen ocurrir en momentos inoportunos, como durante reuniones de trabajo o mientras se duerme.
Las razones detrás de estas llamadas son diversas, pero dos de los fines más comunes son comerciales y fraudulentos. Por un lado, las empresas utilizan bases de datos para ponerse en contacto con los usuarios con el objetivo de ofrecerles productos o servicios.
Por otra parte, los ciberdelincuentes las aprovechan para llevar a cabo estafas. En ambos casos, es esencial saber qué hacer en el momento en que, por error, se responde a una llamada. Actuar de man