Vecinos del sector El Picacho denuncian la instalación de un taller clandestino de latonería y pintura en plena zona residencial, operando desde hace más de tres meses en una vivienda ubicada en la calle principal.
La actividad, que por ley debe desarrollarse en zonas industriales, ha generado graves afectaciones ambientales, sanitarias y sonoras en la comunidad.
“Este taller tiene más de tres meses contaminando la naturaleza, el agua de los pozos de los edificios, ya que todos sus residuos químicos los tiran a la tierra, al monte y a los desagües”, advierten los habitantes, preocupados por el impacto directo en el ecosistema local y en la salud de quienes residen en las inmediaciones.
Además de los residuos tóxicos, los vecinos denuncian que el taller opera todos los días hasta altas h