Un grupo de sindicalistas en Venezuela denunció este jueves, en una protesta en Caracas, que el país vive un momento de «represión inaudita», al tiempo que exigió la liberación de los presos políticos y el aumento del salario mínimo, que se mantiene en 130 bolívares, la moneda local, equivalentes a menos de un dólar según el tipo de cambio oficial.
«Hay un espacio ahorita de represión inaudita que se viene generando contra el pueblo venezolano. Y en esa situación, nosotros queremos rechazar la manera cómo no solamente se reprime al pueblo, a los trabajadores, a los dirigentes sociales, sino a los que protestan», afirmó el presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Eduardo Sánchez.
El sindicalista se pronunció durante una concentración