Revisada

Delincuentes mezclados entre la multitud despojaron de sus pertenencias a decenas de visitantes durante la celebración en honor a la Virgen de La Caridad

Lo que debía ser una velada de fe y tradición en el Pueblo Mágico de Huamantla se convirtió, para muchos, en una amarga experiencia. Durante “La Noche que Nadie Duerme”, miles de personas admiraban las coloridas alfombras de aserrín elaboradas en honor a la Virgen de La Caridad, cuando carteristas convirtieron la noche en un desfile de hurtos invisibles: carteras, celulares y otras pertenencias personales desaparecieron como por arte de magia.

Antes de la medianoche de este jueves 14 de agosto, entre el ir y venir de feligreses y curiosos, los delincuentes aprovecharon la multitud para poner en práctica la técnica conocida com

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