Los primeros capítulos son siempre importantes. Da igual que hablemos de una serie de televisión, de una novela o de un campeonato de 38 jornadas. Además de para hilar una buena historia, los episodios iniciales sirven para comprometer al espectador y captar su atención. En ese sentido no puede quejarse el Mallorca, al que LaLiga ha obsequiado por segundo año consecutivo con un comienzo de fábula . Con un partido tan bonito como complejo que le cruzará con el campeón, con las gradas de su estadio llenas y medio planeta mirando (Son Moix, Movistar LaLiga, 19.30 horas).
Como manda la tradición veraniega, el Mallorca se sitúa sobre los tacos de salida con un equipo sujeto con alfileres y expuesto todavía a múltiples cambios. Los quince días que le quedan al mercado terminarán de esculpir