El Gobierno laborista del Reino Unido ha depositado en la inteligencia artificial (IA) todas sus esperanzas para acabar con los problemas de sobrepoblación en las cárceles del país . Desde su llegada a Downing Street hace poco más de un año, el primer ministro, Keir Starmer , ha defendido la implementación de nuevas tecnologías en los servicios públicos, incluidos nuevos métodos de control y vigilancia que permitan crear una "cárcel fuera de la cárcel" y mejorar la eficiencia de las instituciones penitenciarias. La efectividad de estos mecanismos, sin embargo, todavía no ha quedado demostrada y su implementación ha generado preocupación entre las organizaciones de defensa de los derechos humanos .
La última medida anunciada por el Gobierno consiste en utilizar la IA para pr