Los líderes europeos esperaron hasta la madrugada del sábado que el presidente Donald Trump los llamara desde el Air Force One para confirmarles que no había alto al fuego en Ucrania y cuales habían sido los entretelones de su cumbre con Vladimir Putin en Alaska. Trump había aceptado un acuerdo de paz, sin alto al fuego. Una posibilidad que beneficia a Rusia y que abandonó la posición inicial del presidente norteamericano, consensuada con los europeos, antes de su llegada a Alaska.
Desde muy temprano el presidente francés Emmanuel Macron; la primer ministra italiana Giorgia Meloni; el canciller alemán Friedrich Merz; el primer ministro británico Sir Keir Starmer; el presidente finlandés Alecander Stubb; el primer ministro polaco Donald Tusk; el presidente del Consejo Europeo, Antonio Cost