El 80% del contenido de internet no figura en Google ni en otros buscadores tradicionales. Ese universo se llama Deep Web. Abarca desde bases de datos académicas hasta redes clandestinas. Su sector más turbio, la Dark Web, requiere navegadores como Tor y se caracteriza por permitir el anonimato, lo que facilita delitos digitales complejos.
Cómo funciona la web invisible para el usuario común
El acceso a la Deep Web demanda conocimientos técnicos y el uso de tecnologías específicas. Herramientas como I2P, GNUnet o Freenet permiten ingresar a sitios no indexados, fuera del alcance habitual. Estas plataformas ocultan la identidad del usuario, encriptan el tráfico y dificultan el rastreo.
"La Deep Web es como un iceberg: lo que vemos es solo la punta. Desde el nivel 1, el que navegamos todo