La , la ugandesa , mostró públicamente su , desatando una ola de críticas en todo el mundo y colocando en tela de juicio el papel de la Corte Internacional de Justicia cuando de crímenes de guerra se trata.
En ese sentido, varios gobiernos del mundo elevaron una nota de protesta ante lo que consideran una escandalosa parcialización del sistema internacional de justicia.
Uno de los primeros gobiernos que manifestaron su rechazo fue el gobierno de Irán, quien calificó como una «violación de la ética judicial» la postura de Sebutinde.
“Escandalosa violación de la ética judicial: la se pone abiertamente del lado de Israel, un régimen con múltiples casos ante la corte”, expresó el viceministro de Asuntos Exteriores de Irán para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Kazem Qaribabadi, tras cues