Una de las primeras cosas que hizo Alí Sánchez cuando se enteró que los Medias Rojas de Boston fue hablar con Carlos Narváez.
Los dos receptores venezolanos jugaron juntos en el Cardenales de Lara en la temporada pasada de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional. Allí nació una amistad que, ambos coinciden, ha perdurado todo el año y que le ha facilitado la adaptación al caroreño a su nueva organización.
«Ha sido una bienvenida bien grata», admitió el larense a El Emergente en este fin de semana, en su primera estadía en el Fenway Park. «Carlos me ha ayudado bastante. Hemos estado en comunicación durante el año. Yo siempre he estado pendiente cómo le ha estado yendo. Él es tremendo muchacho y ha trabajado (para lo que está logrando).»
Carlos Narváez sufrió una lesión a principios de m