Nolberto Solano ha llegado a Pakistán como nuevo entrenador de la selección nacional, generando gran expectativa en el país asiático. El exjugador peruano aterrizó en el Aeropuerto Internacional Jinnah el sábado 16 de agosto, donde fue recibido con honores por representantes de la Federación de Fútbol de Pakistán y un grupo de jóvenes que le ofrecieron ramos y collares de flores como símbolo de bienvenida.

Solano, conocido como 'Nobby', se mostró agradecido por la cálida recepción. En sus primeras declaraciones, expresó: “Me siento muy honrado de estar en Pakistán como entrenador principal de la selección sub-23 y absoluta. Creemos en el talento de nuestros jugadores y estoy aquí para demostrar lo que podemos lograr juntos”.

Tras su llegada, Solano se reunió con los altos mandos de la Federación para discutir su estrategia de trabajo. El presidente de la Federación, Syed Mohsen Gilani, destacó la experiencia del peruano, afirmando que “el entrenador Solano aporta una gran experiencia y una visión sólida. Creemos que puede impulsar el fútbol pakistaní y construir un equipo competitivo”.

Muhammad Shahid Niaz Khokhar, secretario general de la Federación, también elogió la llegada de Solano, considerándola un gran avance para el fútbol en Pakistán. “Este es un gran paso para nosotros. Con el entrenador Solano a bordo, nos comprometemos a construir una estructura futbolística más sólida”, concluyó.

La llegada de Solano se produce en un momento crucial para el fútbol pakistaní, que recientemente fue absuelto de la suspensión impuesta por la FIFA debido a interferencias externas. Con su contratación, Solano tiene la tarea de liderar tanto a la selección absoluta como a la sub-23, en un contexto donde la Federación busca revitalizar el deporte en el país.

Desde inicios de 2025, la Federación ha enfrentado una crisis tanto deportiva como institucional, pero con la reciente elección de una nueva directiva, se han abierto nuevas oportunidades. Solano, quien tiene experiencia como asistente de Ricardo Gareca en la selección peruana, ahora se enfrenta al desafío de transformar el fútbol en Pakistán, comenzando con visorias que han convocado a más de 500 jóvenes talentos.