El historiador Aurelio de los Reyes revisó los periódicos de la época
Todo comenzó en 1896, el mismo año que Porfirio Díaz se reeligió como presidente por cuarta ocasión. En la segunda mitad del año Gabriel Veyre y Claude Ferdinand Bon Bernard, enviados de los hermanos Lumière, arribaron al país con un invento insólito en su equipaje: el cinematógrafo.
El primero en ser testigo de sus poderes fue el dictador, en una muestra privada en el Castillo de Chapultepec fechada el 6 de agosto. Luego el 14 del mismo mes se hizo la primera proyección cinematográfica en la Droguería Plateros, famosa por ser la primera de carácter comercial del país. El evento fue anunciado en los periódicos, donde se especificaba que sería una exhibición para reporteros y científicos.
No sería hasta el 27 de ago