–Son emblema de alfajores de Villa Carlos Paz, pero han trascendido mucho más allá de la villa.
–Creo que lo nuestro es un buen emblema de la provincia de Córdoba y el alfajor, un embajador de una provincia que tiene mucho de historia.
–Son la clásica empresa iniciada a pulmón por tus viejos. ¿Cómo fue ese inicio?
–Mi viejo no es de Carlos Paz, él es de Quilmes. Se vino para acá con su madre después del fallecimiento de su padre; conoció a mi mamá y ahí arrancaron. Él cuenta siempre que no quería trabajar para otro, empezaron haciendo pebetes, pan con chicharrón, prepizzas, que en esa época, 53 años atrás, existían en una parte de Buenos Aires, y Córdoba no tenía. Empezaron en el garaje de un hotel, que estaba en el barrio de La Quinta.
–¿Y el alfajor cuándo aparece?
–A los poquitos l