Los incendios que asolan el noroeste y oeste de España han arrasado ya 50.000 hectáreas en Galicia, y mantienen desalojadas a 3.500 personas en Castilla-León, mientras que en Extremadura, el declarado hace seis días en Jarilla (Cáceres), está "completamente desbocado".
Solo en Ourense, la provincia más golpeada, hay 12 fuegos activos, de los que algunos se han reactivado en las últimas horas. Allí, el mayor es el de Chandrexa de Queixa, que lleva arrasadas unas 17.500 hectáreas, siendo ya el más grande de la historia de Galicia. Además, a él se unieron los focos de Requeixo y Parafita, así como el de Vilariño de Conso-Mormentelos.
Por precaución, se ha procedido al confinamiento de más de 20 municipios, entre los que están los vecinos de los núcleos de población de Laceiras o Covelo, y s