El de Barrika, más regular que nadie, logra el anillo del LIV sin conquistar una cita en todo el año y tras perder dos ‘playoffs’ seguidos
Jon Rahm se marcó un Alzamora. O, lo que es lo mismo, conquistó el circuito del LIV Golf sin vencer un solo torneo, tal y como hiciera Emilio Alzamora en 1999, cuando se llevó el Mundial de 125cc sin ganar una sola carrera para desespero del italiano Marco Melandri, que incluso en la última carrera, viendo que volvería a ser segundo su rival y que con eso le alcanzaría para llevarse el laurel, frenó para intentar sacarle de la carretera. No lo consiguió y nada celebró. Y aunque el golf no es un deporte donde se puedan sacar los codos, sí que se puede meter uno en la cabeza del otro. Eso es lo que hizo Rahm con el chileno Joaquín Niemann, el mejor d