Muchas veces, los equipos requieren por una emergencia a un jugador que pueda cubrir varias posiciones con una solvencia que no rompa el plan del equipo en un juego. Eso fue exactamente lo que significó Luis Salazar en su trayectoria, de cuyo debut en Grandes Ligas se cumplieron el pasado 15 de agosto 45 años.

Bateador de buen contacto, poder ocasional y buena velocidad corriendo las bases o detrás de un batazo, fue un jugador de gran confianza para sus mánager, sin el rango de estrella que tienen otros.

Padres de San Diego fue quien le dio la oportunidad de estrenarse en Las Mayores. Nacido en 1956, tenía 24 años al momento de su estreno. La maduración en las menores dejó ver que estaba lista para este nivel y por unos cuantos años.

No fue fácil. Firmó originalmente con Reales de Kansa

See Full Page