Los costos de materiales y construcción, así como procesos burocráticos, frenaron el desarrollo de torres como Mítikah, Icon San Ángel y University Tower.
@DianaZavalaIb
Durante poco más de una década, la Ciudad de México fue escenario de proyectos habitacionales que transformaron su paisaje urbano. Torres como Mítikah, University Tower e Icon San Ángel superaron el promedio de altura de los desarrollos capitalinos y se convirtieron en referentes de la verticalización.
Sin embargo, el impulso para construir nuevos rascacielos de vivienda se detuvo en los últimos años y dirigió la apuesta a edificios que no llegan a los 20 pisos.
Este freno obedece a una combinación de factores como tiempos de autorización largos, costos de construcción altos por condiciones sísmicas y lacustres,