En México, los últimos años la pobreza disminuyó de forma significativa. No fue un milagro ni un efecto estadístico pasajero. Fue el resultado de decisiones políticas que pusieron en el centro a quienes históricamente habían sido relegados. La transformación no inició por casualidad, tiene rostro, estrategia y convicción.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), entre 2018 y 2024 más de 13 millones de personas salieron de la pobreza. La pobreza multidimensional pasó de 41.9% a 29.6%, y la pobreza extrema bajó de 7.1% a 5.3%, lo que representa una reducción de más de 2 millones de personas en condiciones de mayor vulnerabilidad. Estos resultados no son menores: son el reflejo de un cambio estructural en la manera de entender el desarroll