Ciudad de México. A última hora de la noche del lunes, decenas de personas colmaron la sala de llegadas internacionales del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Lo hicieron con especial atención, como si no hubiera nada más importante que mirar la pantalla y encontrar el número de vuelo que se aproximaba desde China. Cuando el avión aterrizó, un grupo de niñas con jersey de equipos de futbol americano formaron una fila para recibir con vivas y gritos de “México, México” a la selección mexicana femenil que conquistó por segunda vez los Juegos Mundiales de 2025.
“Sí se pudo, sí se pudo”, cantaron amigos, familiares y pasajeros que buscaban la puerta de abordaje mientras las vencedoras de la final contra Estados Unidos (26-21), alegres, festivas, también cansadas por un viaje d