El gobierno de Estados Unidos ha ejercido una fuerte presión sobre México para frenar el tráfico de drogas hacia su territorio, particularmente el fentanilo.

Una de sus principales estrategias ha sido la captura y extradición de líderes del narcotráfico mexicano, quienes una vez bajo custodia se convierten en piezas clave para avanzar en investigaciones de mayor alcance.

En varios de estos casos, los capos han aceptado acuerdos de culpabilidad que les permiten obtener sentencias reducidas a cambio de brindar información a las autoridades estadounidenses.

El caso más reciente es el de Ismael “El Mayo” Zambada , uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa, quien se declarará culpable el próximo 25 de agosto, de cargos de narcotráfico en una corte de Nueva York.

Su decisión, tras dé

See Full Page