El número de víctimas mortales del ataque perpetrado por hombres armados contra una mezquita y viviendas cercanas en el estado de Katsina, en el noroeste de Nigeria, ha aumentado al menos a 50, mientras que otras 60 personas han sido secuestradas, según informaron el miércoles responsables locales y residentes.
El ataque se produjo a primera hora del martes en la remota comunidad de Unguwan Mantau, en el distrito de Malumfashi, cuando los fieles musulmanes se congregaban para el Fajr, la oración del alba. Los testigos informaron de que los asaltantes armados llegaron en motocicletas y abrieron fuego dentro de la mezquita antes de avanzar por el pueblo.
Aminu Ibrahim, legislador representante de Malumfashi, dijo que al menos 30 personas habían muerto y otras 20 habían sido quemadas vivas