La industria PyME atraviesa su peor momento en años . No logra salir de la recesión y la principal preocupación es la escasa demanda. Lejos de la reactivación prometida, el nivel de actividad entró en una meseta con el estancamiento de los salarios y la disminución del crédito. En este escenario , la preocupación por la debilidad de la demanda alcanza al 68% de las empresas, pero además en cinco sectores supera el 70%: textiles y prendas de vestir, productos de cuero y calzado; muebles, madera, corcho y paja; sustancias y productos químicos, y metalmecánica están entre los más afectados, y hasta en el sector de alimentos tienen a más de la mitad de sus firmas afectadas.
Mientras las industrias temen por su continuidad y se deterioran las proyecciones de inversión, la principal varia