Los hinchas se pierden en la madrugada por los pasajes que rodean el Cilindro. Salen por Deseado hasta Alsina, chapoteando entre los adoquines porque la lluvia no dio tregua. Otros, eligen avanzar en la dirección opuesta por Mozart y Corbatta. Están empapados, es muy tarde, pero el sueño los moviliza. Racing llegó a los cuartos de final de la Libertadores con un triunfo épico y ya es posible decir sin temor a equivocarse que Gustavo Costas armó un equipo con mística copera . Desde que retornó al club, no perdió ninguna serie mano a mano a nivel internaciona l.

"Este grupo tiene corazón, tiene alma. Sabíamos que en casa, con nuestra gente, íbamos a darlo todo. No era solo remontar; era mostrarle al continente que Racing está vivo y va por más. La Libertadores es nuestro sueño, y no n

See Full Page