Vecinos de la Roma, Condesa y Narvarte participaron ayer en el foro Rumbo a la legislación del ruido con visión ciudadana. Foto: Especial
Durante el conversatorio Rumbo a la legislación del ruido con visión ciudadana, vecinos de las colonias Roma, Condesa y Narvarte acusaron que el ruido constante de bares y restaurantes les ha provocado problemas de salud como taquicardia, hipertensión, depresión, hipoacusia e insomnio.
Es impresionante que no se pueda reglamentar, ni exigir un respeto a la ciudadanía en general, ya sea por (el ruido que generan) antros, por tiendas, por patrullas, por ambulantes”, señaló Connie Guevara, vecina de la Hipódromo Condesa.
Desde las 08:00 que llegan a limpiar (los antros), la música está arriba de los 60 decibeles, que es muchísimo para las viviendas, y