Si algo tiene Dog House es que nos hace más humanos a todos. También a nuestra querida presentadora Chenoa , quien nos ha abierto las puertas de su corazón y, durante seis semanas, ha acompañado a las familias que se han acercado al albergue en busca de un nuevo amigo peludo . Gracias a su carisma y sensibilidad, la artista no solo ha guiado a los espectadores, sino que se ha convertido en un verdadero apoyo para las familias y los perros durante este emocionante viaje hacia un nuevo hogar.
A lo largo de estos meses, hemos sido testigos de historias entrañables, reencuentros inesperados y segundas oportunidades para decenas de perritos. Sin embargo, hay una historia que ha pasado desapercibida y que mucho tiene que ver con las que se narran en el programa: la historia de Chenoa