El anuncio de la Universidad de Tel Aviv generó expectativa global: en los próximos meses, se realizará el primer implante de médula espinal humana diseñado a partir de células del propio paciente. El procedimiento busca lo que hasta hoy era impensado: restaurar la comunicación nerviosa en personas paralizadas tras un accidente o lesión grave.
La magnitud del avance se comprende mejor al considerar las cifras de la Organización Mundial de la Salud: más de 15 millones de personas en el mundo conviven con lesiones medulares , la mayoría provocadas por caídas, accidentes de tránsito y violencia. Sin una cura definitiva, la atención actual solo estabiliza al paciente y mejora la calidad de vida con fisioterapia, dispositivos de asistencia o cirugías paliativas.
Cómo funciona el implant