Al menos uno de cada cinco miembros del colectivo han experimentado esta situación en algún momento de su vida. Las fundaciones Eddy y Manolita Chen les ofrecen casa y futuro
Después de una fuerte discusión con su madre, Marta Vaquero decidió hacer las maletas y salir de casa. “No era la primera vez que teníamos una pelea. En otras ocasiones, al volver a casa me había encontrado con la cerradura cambiada, sin poder entrar, así que opté por irme yo”, cuenta esta madrileña de 26 años sentada en un banco de un parque de Pozuelo de Alarcón. Vaquero, que se declara lesbiana, señala que se debió a su condición sexual. Cuando acudió a casa de su padre, no la acogió. Fue en agosto de 2020, con muchas restricciones de la pandemia todavía vigentes. Vaquero no durmió en la calle ningún día, pero ha