Dos exfuncionarios huyeron, luego de ser acusados de dirigir un grupo criminal en secreto. Su antiguo jefe, que ahora es un poderoso senador del partido de la presidenta, está siendo interrogado sobre lo que sabía al respecto.
Y el momento no podría ser peor para la mandataria de México, quien enfrenta ese escándalo de corrupción mientras el presidente Donald Trump redobla las acusaciones de que los cárteles de la droga tienen al gobierno mexicano bajo su control.
En el centro del escándalo se encuentra el senador Adán Augusto López Hernández, exsecretario de Gobernación de México, exgobernador del estado de Tabasco, y hombre de confianza del expresidente Andrés Manuel López Obrador. Dos hombres nombrados por López Hernández en Tabasco, un secretario de Seguridad y un jefe de la policía