El aeropuerto Alicante-Elche da un nuevo paso en los controles de llegadas de vehículos y ha licitado por más de un millón de euros las obras de remodelación de las zonas de aparcamiento. El objetivo que se ha marcado Aena es doble: por un lado, se quiere dar coherencia a los actuales servicios y situará en la planta -2, la de llegadas, todos los autobuses y, por otro, instalar barreras de acceso en los puntos de espera y estacionamiento de todo aquello que no es servicio público.
Las consecuencias inmediatas serán que los propietarios y empresas de los Vehículos de Transporte con Conductor (VTC) y de los buses quedarán registrados con sus matrículas y se facilitará la comprobación. En el ámbito estadístico, permitirá medir el flujo para necesidades futuras. Esta nueva reorganiza