La Mona Jiménez es uno de los grandes referentes e impulsores del cuarteto en el país, con una carrera que abarca varias décadas y que lo mantiene vigente como en sus primeros días. A lo largo de los años, el cantante se convirtió en un ícono del género. Sin embargo, hay una faceta desconocida del músico que, gracias a sus nietos, el público empezó a descubrir. Detrás del hombre que recorre el país con su música, se esconde un abuelo muy compinche que acompaña a sus seres queridos en cada paso que dan y en cada decisión que toman. Paloma Delich es una de los cinco nietos del intérprete y, lejos del mundo mediático, también logró destacarse por su talento.
Hija de Natalia, la nieta del cuartetero decidió dedicarse de lleno al deporte y se convirtió en una hábil nadadora, ganadora de va