La formación Vaca Muerta , ubicada en Neuquén, es el segundo mayor reservorio de gas no convencional después de China y el cuarto de petróleo en el ranking global. Su potencial la convierte en una pieza estratégica para el futuro energético de la Argentina y en un activo con proyección internacional.
Vaca Muerta tiene la capacidad de transformar la economía argentina. Sin embargo, el hecho de cómo transportar millones de barriles desde el corazón de la Patagonia hasta los puertos que permitan exportarlos a gran escala sigue siendo un interrogante. La respuesta llegó con un proyecto de infraestructura que promete marcar un antes y un después.
Se trata del Vaca Muerta Oleoducto Sur (VMOS), la obra privada más ambiciosa de las últimas décadas. El ducto recorrerá 437 kilómetros desde