Uno de los grandes protagonistas de la noche en el Carlos Tartiere este domingo fue Vinícius, que inesperadamente fue suplente en el Real Madrid. Durante los 90 minutos de partido, al brasileño le dio tiempo a quedarse casi dormido en el banquillo, salir, dar una asistencia, marcar gol, discutir con el árbitro y la grada y hacer gestos de mandar "a segunda" al Oviedo.

El brasileño está poco acostumbrado a estar en el banquillo y su actitud en él lo dejó claro. Durante la hora que no participó en el partido del equipo madridista, las cámaras captaron a Vinícius bostezando e intentando evitar quedarse dormido.

Sus esfuerzos por mantenerse despierto acabaron cuando aun faltaba media hora para el final del partido. El 7 del conjunto blanco saltó al terreno de juego con el 0-1 en el marcador.

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