En la madrugada del 20 de abril de 1997, los vecinos de Algete, en Madrid, quedaron impactados con una trágica noticia: habían encontrado el cuerpo de una adolescente en un descampado en las afueras de la ciudad.
Se trataba de Eva Blanco , una estudiante de 16 años que había salido esa misma noche con sus amigas a una fiesta y que poco después de separarse del grupo, se la perdió de vista.
La escena del hallazgo parecía sacada de una película de terror: el cadáver de Eva presentaba varias puñaladas y tenía indicios de haber sido atacada sexualmente .
La investigación del caso se convirtió en una de las más enigmáticas de España, ya que la policía trabajó en varias hipótesis y estuvo detrás de decenas de pistas. Sin embargo, el caso no se resolvió hasta 18 años después, cuand