Nacido en Fredonia, Antioquia, y muerto hace treinta años en Medellín, Rodrigo Arenas Betancourt es uno de los escultores latinoamericanos más importantes del siglo pasado. Sus obras transmiten la sensación de movimiento, de fuerza y potencia. Aunque muchas de sus esculturas están expuestas en espacios públicos de diferentes ciudades colombianas, es una finca del sector rural de Caldas, Antioquia, el lugar que más trabajos suyos conserva. Allí vive la poeta y docente María Elena Quintero, la viuda del artista y escritor.

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María Elena conoció a Arenas Betancourt en Santa Rosa de Osos, cuando ella tenía apenas 24 años y acababa de ganar un concurso nacional de

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